Ángela Kohler, psicóloga, experta en Neurociencias, Bienestar y Felicidad y CEO de Happynar, nos habla sobre el estrés en niños y niñas.
Luego de que el niño o niña tenga una situación externa exigente que le produzca estrés y que active su Sistema Nervioso Simpático, el niño o niña «tiene que estar condicionado a un ambiente de tranquilidad, mínimo por 30 minutos, donde en ese tiempo se habilita el Sistema Nervioso Parasimpático, que permite la relajación y la regeneración (…) Si no se da este espacio, el niño (o niña) empieza a acumular el estrés».
Los momentos de alerta son necesarios en la vida de las personas, «lo que no se recomienda es que después de vivir esos momentos de situaciones externas exigentes, el niño no retorne a su estado emocional en equilibrio. Esos 30 minutos son fundamentales para que habilite su Sistema Nervioso Parasimpático»
Es muy importante que los niños, desde la Primera Infancia, siempre aprendan a vivir en un estado de creación y no en un estado de superviviencia.
«El estado de supervivencia es cuando activan permanentemente su Sistema Nervioso Simpático y no vuelven a retornan a su equilibrio. Y de esto, cuidadores, docentes, maestros, tienen mucho que ver; y es que cuando vean esas reacciones en los niños, ustedes mismos puedan traerlo, acogerlo y arroparlo, para que ese niño pueda volver a su estado de equilibrio».