El encierro en casa es, sin duda, una oportunidad para que el estrés, la ira y la rabia, tanto de nosotros los adultos como la de los hijos, salgan a flote. Esta circunstancia está poniendo a prueba la convivencia entre todos los que compartimos en el hogar, entre padres y niños y entre hermanos, porque además de tener que compartir espacios reducidos, le añadimos cargas que no se tenían antes como oficios del hogar, aprendizaje virtual, tele trabajo, entre otros. Todo esto conviviendo 24/7.
Ahí radica la importancia de dedicar unos minutos a reconocer y gestionar esas emociones que a veces nos ponen en escenarios no deseados. Realiza junto a tus hijos (no importan las edades) el siguiente experimento. Estamos seguros que tanto tú como ellos sacaran provecho.
Esta actividad es muy fácil de hacer en casa para entender qué pasa cuando no nos hacemos cargo de las emociones y cómo sí podemos hacernos cargo de ellas.
Preparación del volcán | Reflexiones en cada paso |
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Llena la botella con agua hasta un poco más de la mitad, añade dos cucharadas y algún colorante. Cierra la botella con la tapa y pon la botella sobre la bandeja. | Durante la preparación del volcán comiencen a hablar sobre las emociones. ¿Cuáles emociones existen? ¿Con cuáles nos sentimos bien? ¿Con cuáles emociones no nos sentimos tan bien? |
Decora la botella en forma de volcán. Puedes combinar agua con colbón y pasar las tiras por esta mezcla e irlas pegando a la botella, consiguiendo la forma de volcán. Puedes pintarlo y ponerle los adornos que desees (piedras, ramas, plastilina, etc.) | Cuando aparecen emociones como la ira, la rabia, ¿qué sucede?, ¿qué causamos?, ¿qué sentimos?, ¿cómo actuamos?, ¿cómo respondemos?, ¿hacemos daño?… Es importante explicar que la ira es una emoción que siempre nos acompaña, que habita en nuestro cuerpo y que a veces explota y no está mal, sólo que debemos saberla controlar. |
Una vez terminada la decoración, quita el tapón y prepárate para la gran explosión. | Teniendo el volcán en frente vamos a explicar que éste es como si fuera cada uno de nosotros, que cuando le echamos agua, las cucharadas de bicarbonato y el colorante, lo estábamos llenando de cosas que nos producen rabia, ira. Pídele ejemplos a cada uno de la familia. |
Echa un cuarto de vaso de vinagre y verás cómo la lava comienza a salir por el volcán. | Ahora, les vas a decir que estamos ya cargados de muchas cosas que nos producen disgustos y que llega algo que sobrepasa esa paciencia y que en este caso es el vinagre que estamos echando. |
Rellena la botella de agua y repite la erupción con distintas cantidades de vinagre y bicarbonato. | En el momento en que el volcán empieza a erosionar, debemos ir hacienda la reflexión que eso pasa cuando explotamos de ira, nos desbordamos, causamos daño a lo que está alrededor (la bandeja, las rocas, las plantas), |
Comienza a tapar la boca del volcán con pequeñas bolitas de algodón hasta que el volcán deje de sacar lava. | Cuando comiencen a poner las bolitas de algodón, diles que cada una de ellas significa algo que nosotros sabemos que nos relaja, que nos calma. Por ejemplo, ir a leer, mirar el cielo, respirar profundamente, encerrarme por unos minutos, pedir un abrazo, dibujar, cantar… Invita a que cada participante diga algo que lo haga tranquilizarse. En el volcán empezarán a ver cómo la lava va parando de salir, al igual que cuando controlamos nuestra ir con lo que nos tranquiliza. Invítalos a que cuando alguien empiece a alterarse en casa, le recuerden con amor que hay formas de calmarse para que nuestro propio volcán no erosione y cause daño. |
1 Comment
Me parece un ejercicio estupendo para el estres y el encierro de estos dias.
Lo practicare con mi nieto para conocerlo mejor. Gracias